«He combatido el noble combate,
he acabado la carrera, he conservado la fe»
2 Tim 4,7
En las Olimpiadas, solo uno gana la medalla de oro. Pero no me digáis que en una maratón, por ejemplo, llegar a la meta no tiene mérito... Completar la carrera supone mucho esfuerzo. Pues así estamos muchos, en la línea de salida, en los primeros metros de esta carrera.
Hay una frase que nos puede servir: «Lo importante es que lo importante siga siendo lo importante». En la vida hacemos muchas cosas: algunas son muy importantes, otras no tanto y otras no son nada importantes. Pues de prioridades se trata la vida.
Al empezar un nuevo curso, tenemos muchos kilómetros por delante. Si hacemos que lo importante sea lo primero, correremos bien. Si lo hacemos así, llegaremos a la meta.
Todos los atletas buscan algún truco que les ayude a correr mejor. Yo te voy a compartir un truco que les ha funcionado a muchos maratonistas. Ese truco les ha enfocado en la meta, les ha dado fuerza cuando iban a abandonar o les ha hecho disfrutar de la carrera. El truco es poner a Dios lo primero. Cuando ponemos a Dios en primer lugar, todo se pone en orden.
Os recomiendo ver un vídeo de Denzel Washington a los recién graduados de una universidad, titulado Put God first.
Si lo hacemos así, llegaremos a la meta y con san Pablo podremos decir «he combatido el noble combate, he acabado la carrera, he conservado la fe»ª (2 Tim 4,7).
Si te ha gustado el escrito, dale al corazón que hay abajo a la derecha.
Un abrazo y ¡que tengas un buen curso!
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